Saturday, May 31, 2008
Boletería agotada
Jorge, Germán, Johanna, Samuel, Angie, Melissa y Óscar habían caminado más de treinta cuadras.
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Sin casa y sin plata, uno acaba viviendo en Internet. Se consigue un espacio, se meten las cosas y se acumulan. A veces te visitan, comen, cagan en tu baño, se quejan de ti como huésped y dejan los platos sucios.